Los sistemas que emplean energías renovables tienen el beneficio de reducir las emisiones de sustancias contaminantes y los impactos ambientales asociados a los combustibles fósiles. El uso de biomasa supone una considerable ventaja medioambiental, pues su combustión no puede liberar más CO2 del fijado previamente durante el crecimiento de la planta mediante la fotosíntesis, obteniéndose un balance neutro de las emisiones. Además, coste del combustible utilizado en una caldera de biomasa durante un año, suele ser inferior al que tendría una caldera con la misma potencia que emplee combustibles fósiles tradicionales.
Uno de los biocombustibles sólidos densificados más importantes que pueden encontrarse en el mercado español son los pellets. Cuando se utilizan estufas de pellets, es fundamental conocer la calidad del combustible que va a emplearse, ya que una mala calidad puede reducir el rendimiento y la vida útil de la instalación. Para poder estar seguro de que la calidad de los pellets va a ser adecuada, es conveniente utilizar aquellos que tengan certificado de calidad. La Norma Europea UNE-EN ISO 17225-2:2014, (Biocombustibles sólidos. Especificaciones y clases de combustibles. Parte 2: Clases de pélets de madera.), establece una serie de criterios de clasificación que permiten agrupar los distintos tipos de pellets de acuerdo con sus características principales. De este modo, es posible que el usuario pueda estar seguro de que el material cuenta con las características de calidad mínimas establecidas, que son garantizadas mediante controles de calidad en el proceso de fabricación y de distribución.
La normativa establece tres clases de pellets para usos no industriales de acuerdo con sus características técnicas, y nos asegura ciertos valores de la densidad (superior a 600 kg/m3), así como de sus diámetros y longitudes, con ciertas tolerancias. Las clases son:
- Clase A1 incluye aquellos fabricados con madera de origen forestal y residuos de madera que no hayan sido tratados químicamente y tengan reducidos contenidos en cenizas (≤0,7 %), nitrógeno (≤0,3 %) y cloro (≤0,02 %). Entre sus características están un poder calorífico mayor o igual a 16,5 MJ/Kg, una humedad inferior al 10% y un contenido en finos menor al 1%.
- Clase A2 tiene características similares a la A1, con la diferencia de que su poder calorífico es mayor o igual a 16,3 MJ/K, y sus contenidos en cenizas (≤1,5%) y nitrógeno (≤0,5%) son algo mayores.
- Clase B permite utilizar también madera proveniente del reciclaje y residuos industriales que no hayan sido tratados químicamente, y su poder calorífico es más bajo, siendo éste mayor o igual a 16,0 MJ/K.
Cuando los pellets no tienen sello de calidad, ningún organismo externo nos asegura que las características técnicas indicadas son las que realmente tiene, y no nos quedaría más remedio que fiarnos de las que aporte el fabricante y ver si posteriormente se producen problemas de rendimiento en la combustión de los mismos.
Esperamos que os sea útil y veros de vuelta pronto.
Un cordial saludo a todos.
Equipo de Tu Tienda de Chimeneas S.L.